El risotto es de ese tipo de recetas en las que necesitas tiempo y paciencia pero merece tanto la pena el resultado que tienes que hacerla para disfrutar de un rato de paz en la cocina.
Cualquier excusa es buena para invitar a amigos o familia a comer un risotto tan rico como este.
Espero haberte dado mucha envidia y que te animes a prepararlo aprovechando los últimos tomates de la temporada.
Ingredientes para 4 personas
🔸6-7 tomates pera
🔸4 dientes de ajo
🔸Tomillo o albahaca
🔸Aceite de oliva virgen extra
🔸Sal y pimienta
🔸8-10 gambones
🔸800 ml de caldo de pescado. Puedes aprovechar las cabezas y cuerpos de los gambones y hacerlo casero. Si no llegas a la cantidad completa con caldo de pescado o verduras.
🔸2 cucharaditas de concentrado de tomate (una para el caldo y otra para el risotto)
🔸1 cebolla pequeña o 1/2 si es grande
🔸200 gramos de arroz
🔸200 ml de vino blanco
🔸50 gr de parmesano o cualquier queso curado
🔸Una nuez de mantequilla
*Si los tomate están muy ácidos puedes añadir un poco de azúcar o sirope de agave o incluso asar unas zanahorias y hacer una especie de puré con ellas y añadirlo con los tomate al arroz.
Elaboración:
Hacemos una cruz a los tomates para que luego sea más fácil pelarlos. Y los colocamos en una bandeja de horno con tomillo, ajos machacados, aceite de oliva virgen extra, sal y pimienta. Lo llevamos al horno a 200 grados durante al menos media hora.
Mientras preparamos un caldo con las cabezas y cuerpos de los gambones. Añado concentrado de tomate, vino blanco y cubrimos con agua, desespumamos y dejamos que cueza todo durante 20 minutos mientras preparo un sofrito con la cebolla, que ponchamos a fuego lento con un poco de sal.
Cuando los tomates estén listo, los retiramos del horno y esperamos a que se enfríen para quitarles la piel.
Hacemos lo mismo con los ajos y reservamos todo el jugo que han soltado los tomates para añádaselo al risotto.
Añadimos vino blanco a la cebolla y esperamos que se reduzca. Una vez se haya reducido, también añadimos el arroz, removemos todo bien y ponemos el concentrado de tomate, los ajos y los tomates pelados que vamos a ir desmenuzando poco a poco.
Colamos el caldo y ahora vamos añadiendo el caldo al risotto de poco en poco. Removiendo siempre para que el arroz vaya soltando todo el almidón, para que nos quede una textura muy melosa.
Cortamos los camarones por la mitad, rayamos el queso y los añadimos a la cazuela con una nuez de mantequilla cuando el arroz esté en su punto.
¡No olvides ponerle el jugo que han soltado los tomates para aportarle un extra de sabor que marcará la diferencia!
Emplatamos con tomillo y parmesano, servimos y disfrutamos al momento.
Si quieres ver el paso a paso de esta receta en imágenes, está disponible en mi Instagram @foodtropia